La austeridad no tiene que ver con "hacer juegos con los coches", según el secretario general del PSdeG, Pachi Vázquez. Ayer se lo echó en cara al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, cuya primera medida de recorte de gasto fue poner a la venta la flota de vehículos Audi del bipartito. Vázquez le pidió que asuma "la austeridad con mayúsculas", la misma que ha dictado desde Madrid el Gobierno. Interiorizando el discurso de Rodríguez Zapatero, el líder socialista anunció que el sistema se puede poner en peligro sin medidas drásticas: "La injusticia sería no hacer nada". Para dar ejemplo, dictó un recorte de salarios para los altos cargos socialistas del 15%. "Seremos los primeros en apretarnos el cinturón y demostrarle al señor Feijóo que si hay que privarnos, tenemos que privarnos todos; no vale sacarle a unos para darle a otros".
Abel Caballero, el alcalde de Vigo, recogió el guante y anunció que su salario se reducirá en ese 15% a partir del sábado. A sus concejales y a la oposición le propondrá lo mismo. El gesto, en su caso, supondrá un ahorro de 14.000 euros.
Los enormes recortes anunciados por Zapatero despertaron la total oposición de los populares gallegos. El conselleiro de Economía, Javier Guerra, rechazó que la comunidad autónoma deba hacer más recortes. Galicia, según él, "ya tiene los deberes hechos". "Somos la primera comunidad autónoma que se puso un objetivo y lo cumplió, que es tener un déficit del 1%. El del Estado lo multiplica por 11".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 14 de mayo de 2010