Soy funcionaria de educación y no me importa ayudar a salir de esta crisis con la rebaja de mi sueldo ya casi congelado desde hace años. Pero para sentirme bien gastando un poco menos, necesito oír y leer en la prensa que los que se han llevado dinero de las arcas públicas lo van a devolver. Aquí algunos cargos de responsabilidad se llevan millones y no pasa nada, un poquito de ruido y a vivir la vida con la sonrisa falsa del que hace la travesura y no lo pillan. Conviene recortar cargos para ahorrar y para reducir el número de sinvergüenzas que se aprovechan sin escrúpulos de los demás. Así, a los funcionarios y a los pensionistas nos va a doler menos esperar a que todo vaya un poco mejor.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 16 de mayo de 2010