El veredicto del jurado popular sobre los cohechos de Gondomar "saca a relucir la corrupción del PP gallego y pone a Feijóo, Rueda y Louzán en la picota", afirmó ayer Pablo García, secretario de Organización del PSdeG, para quien el fallo "condena no sólo a los ex concejales del PP, sino también a su dirección, a sus superiores, que son los mismos hoy que cuando los dos concejales pedían 540.000 euros a cambio de convenios urbanísticos para financiar la campaña del PP en las elecciones municipales de 2007".
García identifica a Feijóo, Rueda y Louzán como "los verdaderos destinatarios de la condena" porque "nadie puede creer que no fueron ellos los impulsores del cohecho y los destinatarios del dinero para financiar la campaña".
En Gondomar, tanto desde el actual gobierno de tránsfugas como desde la oposición nacionalista expresaron su respeto por el veredicto, que rehusaron comentar. No obstante, el ex alcalde Antón Araúxo, del BNG, apartado de la alcaldía el año pasado por una moción de censura, declaró que el juicio ha servido "para descubrir muchas cosas que se intuían", una de ellas, "la vinculación de la moción de censura con esta trama que incluye a Move Gondomar [escisión del grupo socialista en el anterior mandato] y a los tránsfugas elegidos en las últimas elecciones en la lista del PSOE". Uno de los condenados, el ex edil José Luis Mosquera, declaró en el juicio que parte del dinero recaudado era para financiar la escisión del PSOE que dio origen a Move Gondomar y, de este modo, asegurar el apoyo de la corporación al nuevo plan de urbanismo.
Manuel Núñez Sestelo, líder de Move Gondomar y portavoz del actual gobierno de tránsfugas, lamentó en una alterada respuesta telefónica a EL PAÍS "la información sin contrastar que se ha publicado estos días". "Ni investigáis ni contrastáis. Es absolutamente vergonzoso, aunque es para lo único que servís: para revolcaros en la basura", dijo antes de cortar abruptamente la comunicación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 5 de junio de 2010