El concejal del PP en Benalmádena Manuel Crespo quedó ayer en libertad con una orden cautelar de alejamiento de su esposa, que lo denunció la noche del domingo por agresiones. Crespo fue detenido por la policía en su propio domicilio durante la madrugada y quedó en libertad con cargos tras prestar declaración en el Juzgado de Instrucción 3 de Torremolinos, encargado de los asuntos de violencia de género.
Crespo ocupa las concejalías de Deportes, Personal y de Desarrollo Local, Sostenible y Tecnológico, de la que de momento no ha sido reemplazado. El equipo de gobierno, que preside Enrique Moya, del PP, anunció que esperará a tener más datos sobre el caso de presunto maltrato para tomar "la decisión más idónea".
Moya convocó en la mañana de ayer a su equipo de gobierno con carácter de urgencia tras conocer el incidente, pero se optó por mantener cautela y no tomar ninguna decisión hasta tener más información sobre lo ocurrido y la situación procesal de Crespo. Eso sí, el equipo de gobierno quiso dejar claro su rechazo a "cualquier tipo de maltrato y violencia, venga de quien venga". Los concejales de Benalmádena se manifestaron en un comunicado en contra "claramente y sin duda alguna contra las agresiones producidas por violencia machista".
Manuel Crespo perteneció al Grupo Independiente de Benalmádena (GIB), fundado por el ex alcalde Enrique Bolín, de quien fue uno de sus hombres de confianza y con el que logró su acta de concejal en las pasadas elecciones municipales. Abandonó la formación tras la marcha de Bolín y hace un año participó en la moción de censura que aupó a Enrique Moya a la alcaldía y se integró en el PP.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 8 de junio de 2010