Una anciana de 78 años falleció en la mañana del pasado domingo degollada presuntamente por un vecino de 23 años, Borja B. O., en la barriada sevillana de Parque Alcosa. El supuesto asesino había ingerido alcohol y drogas la noche anterior, y poco después del crimen, durante el que asestó a la anciana varias puñaladas, se entregó a la Policía Local.
El hombre fue trasladado ayer desde los calabozos de la Jefatura Superior de Policía al lugar de los hechos para reconstruir el suceso antes de pasar a disposición judicial, traslado previsto para hoy. Ambos vecinos discutieron y tras la pelea el joven le asestó a la anciana varias puñaladas por causas que aún se desconocen.
El bloque donde ocurrió el crimen está en la calle Ciudad de la Oliva de Sevilla. La hipótesis policial apunta a que en un momento dado el joven le asestó varias puñaladas, tras lo cual volvió a su domicilio y se acostó. Los padres del presunto autor del crimen, que estaban en la playa durante el fin de semana, volvieron por la tarde al domicilio familiar, donde encontraron a su hijo tendido en la cama lleno de sangre.
Tras confesar el crimen el hijo, el padre decidió llevarlo a la comisaría de Sevilla Este. Mientras el Grupo de Homicidios de la policía se hacía cargo de las diligencias, una dotación de Bomberos accedió a la vivienda de la víctima, donde fue descubierto el cuerpo sin vida. Tras las primeras pesquisas, las autoridades desligaron este caso del fenómeno de la violencia de género. Ayer una vecina alegó que tras despertarle el padre, la respuesta del hijo al levantarse al día siguiente fue que "decía que algo había hecho, pero no se acordaba de nada".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 8 de junio de 2010