Juan Montero, magistrado del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), ha imputado a la diputada autonómica de Compromís Mònica Oltra, que debe ser juzgada por una falta de desobediencia. Esa ha sido su conclusión tras tomarle declaración el pasado día 2 por la querella presentada por un intendente de la policía local de Valencia. Los hechos se remontan al pasado abril. Oltra participó en la concentración contra los derribos del Ayuntamiento en el barrio de El Cabanyal, protegido por el Ministerio de Cultura. Ella, distintos concejales de la oposición y vecinos participaron en una protesta disuelta por la policía.
Oltra acudió la pasada semana al juez con vídeos y fotografías que acreditaban que abandonó el lugar, cuando la policía se lo indicó, sin ofrecer resistencia. Así lo entendió la fiscalía, que recurrirá el auto. Pero el magistrado considera que pudo existir una falta de desobediencia recogida en el artículo 634 del Código Penal, castigada con una multa de entre 10 y 60 días.
El PP, fuera de la causa
El juez pide a la sala que se pronuncie sobre la competencia, si procede que el juicio se haga en el TSJ o en un juzgado ordinario. La discusión de fondo son los límites del aforamiento, si procede que sea un tribunal especial aunque el asunto no afecte al funcionamiento de las cámaras. En el auto, el juez rechaza la petición de personación en la causa de cuatro diputados y tres concejales del PP con una querella por delito de resistencia.
Oltra reclamó ayer una "reflexión profunda" sobre la situación de la Comunidad Valenciana, donde "la corrupción sistemática" queda "impune" y los actos "en defensa de la legalidad" son castigados. Ángel Luna, portavoz socialista, expresó su extrañeza por la decisión. "Me parecería ya el colmo que unos, por pedir explicaciones y defender la legalidad, se vean como se ven y otros, sin embargo, estén sacando pecho y haciendo gala de la situación procesal que tienen", dijo, en alusión al caso Gürtel.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de junio de 2010