Felicidades al jurado del Premio Príncipe de Asturias de las Letras por elegir para tan importante premio al gran novelista y ensayista Amin Maalouf. Autor de numerosas obras de inmensa calidad literaria, me atrevería a destacar su aportación por su libro Identidades asesinas, en donde, desde el compromiso, denuncia los fanatismos que provoca el hombre por razones étnicas o nacionalistas.
Amin Maalouf ha dicho: "La identidad ha de ser una ocasión para enriquecerse y no una excusa para hacer prevalecer una parte. Se trata de asimilar, de aceptarse, de tolerar". Y así, desde el respeto y el crecimiento, este escritor libanés remarca la universalidad y la diversidad. Ojalá sirva el reconocimiento literario para ser leído por los nacionalistas excluyentes.
Desde León el Africano, Amin Maalouf, el ciudadano del mundo, propone, frente a las tribus, el mestizaje natural, llamado a seguir siendo concordia entre los pueblos. Enhorabuena, Amin Maalouf.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 12 de junio de 2010