Miles de valencianos disfrutaron ayer durante cuatro horas de la séptima edición del festival aéreo de Valencia, celebrado frente a la playa de la Malva-rosa. La exhibición se inició a las diez de la mañana con los aviones ultraligeros. Sin embargo, fueron el Saeta, un avión acrobático histórico del que sólo quedan tres aparatos en funcionamiento, y las acrobacias de la patrulla Aguila los que más admiración despertaron, junto a los paracaidistas de la patrulla Papea.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 14 de junio de 2010