Bruselas exige más sacrificios. La Comisión pidió ayer a España que "sustancie" nuevas medidas de reducción del gasto público en 2011 para asegurarse de que el déficit público disminuye a un ritmo adecuado para que en 2013 no supere el 3% del PIB, límite fijado por el Plan de Estabilidad de la UE. Bruselas consideró que el techo de gasto para el presupuesto de 2011 (122.000 millones), ya aprobado por el Gobierno, es clave para conseguir esa meta porque supone rebajar el déficit en un 1% del PIB, "pero falta sustanciar otras medidas equivalentes al 0,75% del PIB". Ese 1,75% total equivale a unos 19.000 millones. Semejantes recortes afectarán negativamente al crecimiento, ya revisado el mes pasado a la baja (del 1,8% al 1,3%) por el plan de ajuste. El Gobierno precisó ayer que el recorte adicional del 0,75% exigido por Bruselas debe corresponder a los presupuestos de las comunidades autónomas.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 16 de junio de 2010