Apple ha vendido 50 millones de iPhone. Google, muy pocos de Nexus One y, al principio, solo por la web, cuando dos tercios de teléfonos se venden en las tiendas de las operadoras. "Esto limitó su éxito. Tampoco estaba subvencionado por AT&T, como iPhone", dice Rubin.
"En 2007, países como Nigeria se conectaban al Internet móvil. El acceso era rudimentario, pero demostraba que había demanda. Con iPhone, descubrimos qué era navegar por la red con el móvil. Sin duda hay un antes y un después del aparato", según Arias.
"Apple se apoyó en sus clientes de Mac para lanzar iTunes. Ahora, los iPods e iPhones son sus activos clave", dice Fogg.
"Nexus One es un experimento. Ha fracasado, pero no le preocupa a Google. Apple es una compañía diferente. No hace ensayos: lanza el producto cuando sabe que funcionará. Google aspira al mercado de masas. Apple a uno más pequeño, pero bajo control", dice Milanesi.
Julien Theys coincide: "Nexus One es un ejercicio de estilo, la visión del teléfono ideal. El objetivo es influir en el mercado, marcar tendencia. Si no funciona es porque las operadoras aún tienen algo que decir en el sector, porque los subvencionan. Cuando el mercado publicitario funcione de verdad, los teléfonos serán más baratos. Empresas como Google y anunciantes los subvencionarán a cambio de publicidad".
"Apple ha mimado al consumidor. Con iPhone 4 trata de contrarrestar la fuerza de RIM, que domina el sector profesional con Blackberry", concluye Milanesi.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 8 de julio de 2010