La entidad resultante de la fusión de las cajas Catalunya, Tarragona y Manresa aprobó ayer la emisión de participaciones preferentes convertibles en cuotas participativas por valor de 1.250 millones de euros que suscribirá "de forma exclusiva" el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB). Según explicaron fuentes de la entidad, ésta es en realidad la fórmula por la que la caja obtendrá los recursos con el objetivo de "reforzarse".
Caixa d'Estalvis de Catalunya, Tarragona i Manresa, que celebró ayer su primera asamblea general en Tarragona, aseguró que de momento no tomará ninguna medida para obtener más capital a pesar del suspenso que obtuvo en las pruebas de resistencia bancaria. El director general de la entidad, Adolf Todó, atribuyó ayer este resultado a la estrategia inmobiliaria de la entidad, consistente en no refinanciar préstamos y quedarse con "activos inmobiliarios, que están muy penalizados". A pesar de que ello le costó obtener el peor resultado de las entidades examinadas en Europa, la fusión de Caixa Catalunya, Manresa i Tarragona no variará esta política que Todó calificó de "muy conservadora".
La entidad espera que en el horizonte 2013-2015 su cartera de inmuebles vuelvan a recuperar valor. "Asumimos la devaluación de activos a corto plazo, pero creemos que aumentarán su valor en un escenario de medio plazo", agregó Todó.
Sin recapitalización
El presidente de la caja, Narcís Serra, admitió que durante la asamblea se habló la posibilidad de que la caja buscara nuevas vías para recapitalizarse, después de que las pruebas de estrés publicadas el viernes establecieran que la caja necesitaría 1.032 millones de euros para aguantar el peor de los escenarios planteados. Fuentes de la entidad insistieron en que la recapitalización no es prioritaria. "Prevemos que las circunstancias que planteó ese examen no se producirán en un futuro previsible", razonó Serra.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 28 de julio de 2010