Al embajador de Estados Unidos le preocupa que en Cuba queden más de 100 presos políticos que, según sus palabras, "deben ser excarcelados sin condiciones". Preocupación que comparto.
Pero resulta sorprendente que un país que tiene alrededor de 300 presos en esas condiciones, muchos de los cuales fueron torturados con aprobación de su Gobierno, se atreva a expresar tales deseos. A no ser que el embajador considere que los presos de Guantánamo deben ser contabilizados también como presos cubanos, ya que están en territorio de la isla de Cuba.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 28 de julio de 2010