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El Supremo condena a tres años de prisión a un director financiero por estafa bancaria

Creó una "banca paralela" con la que consiguió desviar 351.486 euros de 59 clientes para cubrir inversiones fallidas. El autor de la estafa es un director de un banco financiero de Lebrija (Sevilla) que el Tribunal Supremo ha condenado a tres años y seis meses de prisión, por delitos de apropiación indebida y falsedad en documento mercantil, informa la agencia EFE.

El Supremo hizo suyos los argumentos del fallo que había dictado en su día la Audiencia de Sevilla, aunque finalmente rebajó la pena total de cuatro años y nueve meses de cárcel al aplicar la atenuante de "confesión y colaboración con la justicia".

La estafa, realizada entre 1998 y 2005, le reportó al imputado unos beneficios económicos de 11.656 euros, dinero destinado a una cuenta a nombre de su hija discapacitada que estuvo ajena a las maniobras realizadas por el padre. Además, disfrutó de unos incentivos valorados en 33.141 euros, ya sea en forma de cruceros, especie o en metálico, tras "lograr los objetivos de productividad marcados" por la empresa.

Según la sentencia, el acusado invertía el dinero de sus clientes en fondos de inversión mejor remunerados y "más arriesgados" que los depósitos a plazo fijo que le pedían, lo que le permitía prometer beneficios adicionales. Para no levantar sospechas, el condenado entregaba a sus clientes unas cuartillas originales del banco, destinadas en principio a amparar cuentas corrientes y no los productos que realmente tenían contratados, en las que realizaba a máquina de escribir los diferentes apuntes contables.

Los clientes, finalmente, reclamaron sus inversiones y el imputado extrajo, para ello, el dinero de cuentas corrientes de otros usuarios de la entidad. La cantidad total reclamada supuso un desvío de 351.486 euros procedentes de 59 clientes. El banco tuvo que devolver un total de 754.756 euros a los clientes afectados.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 17 de agosto de 2010