El matrimonio es una institución imposible, decía Ingeborg Bachmann en 1973, poco después de ser premiada por Simultáneo (en España titulado Tres senderos hacia el algo). Ingeborg Bachmann (Austria, 1926- Italia, 1973) era una vienesa excéntrica -si puede ser excéntrica una centroeuropea medular-, wittgensteiniana de poderosa mandíbula y un sarcasmo particular, que no distinguía entre un cuento largo y una novela, porque "una historia es como un tejido del que no debe perderse ningún hilo". Beatriz, la protagonista de Problemas, problemas, nunca piensa en el futuro, no trabaja y se deja querer por un casado mayor que ella: "Por un Erich divorciado o viudo nunca se habría molestado en ir hasta RENE para pasarse allí horas meditando entre lavados de cabeza, reflejos, manicuras o depilaciones, y mirándose en los espejos".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 21 de agosto de 2010