Mientras el alcalde linense mantiene su pugna con el Gobierno central por el "peaje" con el que pretende recaudar unos 30 millones de euros anuales, delegados de CC OO, UGT y USO iniciaron ayer un encierro para exigir el pago de los salarios correspondientes al mes de junio y el pago del 30% de la paga extraordinaria de julio, que aún no ha abonado el Ayuntamiento.
Los sindicalistas confían en que puedan fructificar los contactos que mantiene el PSOE local con la Junta de Andalucía y el Gobierno central para que la Administración local pueda recibir un anticipo de 2,5 millones de euros pertenecientes a los fondos de Participación de los Ingresos del Estado.
El regidor Alejandro Sánchez anunció ayer que pretende adaptar "los recursos humanos del Ayuntamiento" y cambiar "su estructura salarial". Según el alcalde, la plantilla del Ayuntamiento está "inflada" y tiene "unos salarios desmesurados que no se corresponden con la situación por la que atraviesa el municipio".
Alejandro Sánchez aseguró ayer que, "desde el año 1995, el gasto del capítulo 1 de personal, en el Ayuntamiento ha sido de más del 70%". "Llega el momento de reducir de forma extraordinaria este porcentaje", anunció. El Consistorio tiene planeado encargar la reestructuración de la plantilla a una "empresa de carácter nacional con máxima solvencia". Tras los cambios, el regidor dijo que bajará los impuestos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 25 de agosto de 2010