La reforma de las pensiones que quiere llevar a cabo el Gobierno prima únicamente la edad cronológica, y que yo sepa, no se tiene en cuenta, como sería lógico, la edad laboral, o sea, los años cotizados. De esta manera cobraría igual, al llegar a los 67 años, una persona que haya trabajado y cotizado 50 años que otra que lo haya hecho solo 20, en caso de que en los últimos 20 años hubieran ganado lo mismo. Sería justo y razonable que se buscara alguna fórmula para impedir esta tremenda injusticia.
Lo lógico, a mi entender, sería tener en cuenta ambas variables, como creo que se puso en marcha en algunos países del norte de Europa donde suman la edad cronológica a los años trabajados. La situación en España no permite, de momento, este algoritmo, pero desde luego se puede estudiar e intentar implantar un método más justo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 29 de agosto de 2010