El presidente libio, Muammar el Gaddafi, dijo ayer en Roma que "el Islam debería convertirse en la religión de toda Europa". Gaddafi, que ayer inició una visita oficial de dos días a Italia -la cuarta desde 2008- habló del Corán en un seminario al que acudieron 500 chicas seleccionadas por una agencia de modelos. Las jóvenes debían medir más de 1,65 metros de estatura y vestir de forma recatada, sin minifaldas ni escotes pronunciados.
El líder libio llegó ayer a Roma para celebrar junto al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, el segundo aniversario de la firma del Tratado de Amistad entre ambos países, un acuerdo que compromete a Italia a invertir unos 3.500 millones de euros en el país africano. Gaddafi llevó consigo a Roma 30 caballos bereberes, que participarán en una exhibición.
La Liga Norte, aliada de Berlusconi, ha criticado la creciente influencia de Libia en la economía italiana.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 30 de agosto de 2010