La negociación de las cuentas del Estado
El Gobierno y el PNV ya han iniciado la negociación política previa a los Presupuestos de 2011 con la que el Ejecutivo de Zapatero tratará de salvar las cuentas del Estado para el próximo año y evitar el adelanto electoral. El pasado martes, el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, diseñó con el núcleo duro de Zapatero las líneas generales de negociación.
No habrá "reformas sustanciales" en materia fiscal, sino en todo caso "innovaciones o modificaciones" que supongan un "cierto esfuerzo mayor para quienes tienen más capacidad económica". E incluso estas últimas quedarán condicionadas al resultado de las negociaciones que mantiene el Gobierno con otros grupos parlamentarios, preferentemente el PNV.
El PP ya no oculta su estrategia, que consiste, por una parte, en deteriorar al máximo la imagen del Gobierno, convencido de que el poder caerá en manos de los conservadores "como fruta madura", en expresión de varios dirigentes y, por otra, en forzar en lo posible un adelanto electoral.
El Gobierno español trasladó ayer a Marruecos su "preocupación" por la agresión en El Aaiún contra activistas prosaharauis españoles. El secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Juan Pablo de Laiglesia, se dirigió a las autoridades marroquíes para reclamar "información y explicaciones adecuadas sobre las circunstancias" que rodearon las detenciones.
El PP respondió ayer con duras críticas al viaje a Cuba que hoy emprende una delegación del PSOE encabezada por la secretaria de Organización, Leire Pajín, y la responsable de política internacional del partido, Elena Valenciano. Los populares aseguran que el viaje es un balón de oxígeno para el régimen de Raúl Castro.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, pidió ayer apoyo a la Alta Representante de la UE para la Política Exterior y de Seguridad, Catherine Ashton, para vencer la resistencia de la canciller alemana, Angela Merkel, a flexibilizar la política de la UE hacia Cuba.
José Montilla presidirá hoy la primera reunión del Gobierno catalán tras el verano con un mensaje claro a sus consejeros: que no piensa convocar ya las elecciones (se especulaba con la fecha del 24 de octubre), por lo que podrían celebrarse a finales de noviembre o en diciembre.
Si la derecha elogia a Tomás Gómez y desea su victoria, es porque Trinidad Jiménez tiene más posibilidad de ganar en las autonómicas de Madrid de mayo y porque, de paso, supondría un varapalo para José Luis Rodríguez Zapatero. Esta viene a ser la estrategia de campaña para las primarias de Madrid que ha puesto en marcha el equipo de Trinidad Jiménez.