Un hombre de 45 años murió ayer mientras trabajaba en una clínica dental de Rivas Vaciamadrid, lo que eleva a 63 la cifra de víctimas mortales por accidente laboral este año en la región.
El siniestro se produjo sobre las 10.40, en el número 1 de la calle de Ángel Saavedra, cuando el trabajador, que se encontraba en la cubierta del local, sufrió una descarga eléctrica y se precipitó al vacío desde una altura de tres metros. La víctima entró en parada cardiorrespiratoria por la descarga y sufrió un politraumatismo por la caída.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 7 de septiembre de 2010