El actual gobierno foral de Guipúzcoa (PNV-Hamaikabat) no podrá cumplir su deseo de implantar antes del próximo verano un peaje a los camiones en el puerto de Etxegarate de la N-I. La alta complejidad técnica y política que conlleva la puesta en marcha de una medida de este tipo impide su aplicación en los plazos previstos por la Diputación. El responsable foral de Infraestructuras Viarias, Eneko Goia, aseguró ayer que la N-I será de pago a partir de 2012, y dejó la puerta abierta a extender el mismo canon a otras carreteras de la red de alta capacidad que ahora son gratuitas.
Las Juntas Generales de Guipúzcoa ya dieron a finales de marzo pasado el visto bueno al peaje de Etxegarate tras concluir una ponencia creada en la citada Cámara para aprobar el nuevo sistema de gestión de las carreteras. La decisión contó con los votos del PNV, Hamaikabat y de los socialistas. Ahora corresponde a la Diputación aprobar el proyecto de norma donde se concretarán los detalles de la aplicación de nuevos peajes en la red guipuzcoana, un trámite que, según admitió Goia, se encuentra ultimado.
Goia asegura que Francia tiene previsto aplicar la misma medida
La decisión de Guipúzcoa fue duramente contestada por el Gobierno de Navarra, que promovió una protesta institucional a la que se sumaron las comunidades de Asturias, Castilla y León, Murcia y Valencia.
Ajeno a esta polémica, Goia justificó la medida para Guipúzcoa por "el contexto actual" y tras conocer que "Francia contempla la implantación de un sistema [de cobro] para el año 2012". El peaje de Etxegarate serviría, en palabras del diputado, para "regular el tráfico de la N-I", actualmente saturada por el abundante paso de camiones.
La hoja de ruta marcada por la Diputación establece la aprobación de la norma de los peajes antes de finalizar este año y dedicar 2011 a la elección del mejor sistema tecnológico para el cobro del canon. Las cabinas estarían operativas en 2012.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 7 de septiembre de 2010