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CARTAS AL DIRECTOR

El campo ejidense

El Ejido, Almería

Dicen las gentes de aquí que cada vez que se habla de El Ejido en los medios de comunicación, es para hablar mal. Llevo viviendo aquí 17 años y la situación en los invernaderos apenas ha cambiado; alojamientos tercermundistas cuando los hay, salarios bajos y, en la mayoría de los casos, muy por debajo del convenio, cosa que ha empeorado con la crisis económica, y por si esto fuera poco, un volumen importante de trabajadores sin dar de alta y a otros dándoles solo unas pocas horas a la semana aun haciendo su jornada completa. También es cierto que, en muchos casos, esto ocurre con la complicidad del trabajador, que está cobrando el desempleo y trabajando en el invernadero, algo institucionalizado desde tiempos remotos, al igual que el fraude a Hacienda. Pero en los tiempos que corren es una verdadera vergüenza. Así, sin acabar con esta lacra es imposible construir una sociedad moderna, justa y solidaria.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 19 de septiembre de 2010