El alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, afirmó ayer que la quema de siete contenedores en el barrio bilbaíno de Rekalde de este pasado domingo "no parece un acto de kale borroka", sino el acto vandálico de un pirómano. El regidor declaró a los periodistas que "no es la primera vez que ocurren en esta calle estos hechos", que achacó a las acciones de un pirómano.
"Acabaremos cogiéndole, nos costará más o menos, pero lo acabaremos cogiendo, bien a través de la Ertzaintza o bien de la Policía Municipal, porque no parece que sea un acto de kale borroka", manifestó. El primer edil no se refirió sin embargo al ataque perpetrado por los violentos el sábado por la noche contra tres sucursales bancarias en el Casco Viejo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 21 de septiembre de 2010