Un disparo de Víctor Sánchez, que golpeó en la bota de Torrejón descolocando a Toño, premió el oficio del Getafe y castigó en demasía la voluntad del Racing. Cosas del fútbol. Fiel a su estilo y sus principios, Portugal mantuvo el toque sin prisas, que impera en el equipo cántabro, y las rotaciones, que esta vez dejaron fuera a Arana, probablemente su futbolista más en forma. En su lugar jugó Adrián, precisamente en el partido que le enfrentaba a su padre, Míchel, jefe del otro banquillo. Ganó el padre.
El gol le bastó al conjunto de Míchel para aplicar su versión más oficiosa, menos estética, pero más práctica, escaldado quizás por el mazazo que le dio el Málaga. Le ayudó la falta de gol del Racing, que cuenta con un futbolista hecho, Rosenberg, y otro por hacer, Ariel. El primero tuvo las mejores ocasiones, pero se tropezó con el infortunio o con un magnífico Codina. El segundo, consigo mismo, con su juventud, con su inexperiencia. El resto está más para asistir cuando Arana está en el banquillo. Un penalti no señalado por empujón a Rosenberg fue la última posibilidad del Racing, que intenta acariciar el balón, pero es previsible en el centro del campo.
RACING 0 - GETAFE 1
Racing: Toño; Francis, Henrique, Torrejón, Christian; Kennedy (Munitis, m. 68), Colsa (Lacen, m 75), Tziolis, Adrián (Arana, m. 60); Rosenberg y Ariel. No utilizados: Coltorti; Pinillos, Ponce y Diop.
Getafe: Codina; Torres, Cata Díaz, Marcano, Mané; Boateng, Víctor; Pedro Ríos, Parejo (Borja, m. 88), Del Moral (Mosquera, m. 82); y Miku (Colunga, m. 86). No utilizados: Ustari; Mario, Albín, y Arizmendi.
Gol: 0-1. M. 17. Víctor.
Árbitro: Iglesias Villanueva. Expulsó (m. 89) a Rosenberg por dos tarjetas amarillas. Amonestó a Miku, Marcano, Torres, Francis, Colsa, Lacen y Kennedy.
13.077 espectadores en El Sardinero.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 27 de septiembre de 2010