La Guardia Civil ha detenido en Cádiz a siete empresarios acusados de financiar el narcotráfico. Además, dos de los arrestados se hacían pasar por mandos de la Guardia Civil para convencer a los narcotraficantes de que tenían "comprados" a los agentes encargados de vigilar los puertos. La red, según la Guardia Civil, llegó a cobrar 70.000 euros por ofrecer esta "seguridad" para la entrada de un alijo. Cinco de los siete detenidos están en prisión ya.
La operación comenzó en 2009, cuando los agentes localizaron a una persona que se dedicaba al tráfico de drogas. Cuando investigaron el asunto descubrieron que el ahora detenido, R. R. A., hacía de intermediario con "importantes empresarios" que pretendían "invertir en el narcotráfico". A cambio de un porcentaje, se encargaría de contactar con los productores y traficantes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 3 de octubre de 2010