La Guardia Civil ha desarticulado una banda dedicada al robo de grandes cantidades de aceite en almazaras para su posterior exportación desde Italia. Diez italianos y un español formaban parte de esta organización cuyo último golpe consistió en 100.000 litros sustraídos en una almazara de Purchena (Almería). La operación Olivera, iniciada el pasado junio y aún abierta, ha puesto fin a esta banda, con base en la localidad murciana de Librilla.
La organización manejaba grandes medios logísticos y económicos para llevar a cabo sus robos: camiones-cisterna, coches, herramientas para el trasvase del aceite, cubas o naves industriales. En definitiva, una gran infraestructura para cometer robos por todo el país y para su posterior traslado a Italia.
La investigación se inició tras el robo de aceite en una almazara de Bullas (Murcia), donde se sustrajeron 45.000 litros de aceite. Antes, la banda ya demostró su libertad de movimientos y medios y había robado en Toledo, Albacete, Badajoz y Jaén.
La Guardia Civil ha intervenido en la operación tres cabezas tractoras, cuatro remolques-cisterna, tres coches, dos furgonetas y material para manipular y trasvasar el aceite. Tras el primer robo descubierto por los agentes, las pesquisas dieron sus frutos cuando identificaron una nave industrial en Librilla con nula actividad empresarial y vinculada a ciudadanos italianos. Finalmente, la operación devino en la detención de la banda tras detectar la llegada de tres camiones-cisterna a Purchena, así como varios coches en tareas de vigilancia. A pesar de que Andalucía concentra el 80% de la producción europea del aceite, buena parte de ese aceite se vende a granel a Italia. Ahora la Guardia Civil ha descubierto que también se roba para multiplicar los beneficios.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 5 de octubre de 2010