El I Congreso Internacional de Mujeres Gitanas, que ayer finalizó en Caixafòrum de Barcelona, ha realizado en sus conclusiones una apuesta por la educación y la formación. Entre las medidas que plantea, destacan la petición de que el romaní se aprenda en las escuelas y que se reserven plazas para gitanos en las universidades. "Educación y formación es igual a más inserción en el mercado laboral", aseguran las conclusiones, en las que se pide también que el 8 de octubre se convierta en el Día internacional de la mujer gitana. A este primer congreso han asistido más de 300 mujeres, procedentes de 13 países europeos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 11 de octubre de 2010