Parece una vulgar bolsa de basura de tamaño gigante, pero es un plató de fotografía portátil e hinchable. Inflatable Photo Studio (IPS) es un pedazo de tela de plástico negro, que se infla en tan solo tres minutos para montar una rápida sesión fotográfica en cualquier sitio y condiciones climáticas.
El espacio interior es suficiente para hacer fotografías a cierta distancia y con una iluminación adecuada, según su creador, el fotógrafo neoyorquino Brian Hedenberg.
La versión más grande, de 6 por 10 metros, cuesta 321 euros, la pequeña, 285 euros. Ambos con motor de aire.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 20 de octubre de 2010