El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, emprendió ayer la reestructuración de la práctica totalidad del Ejecutivo regional después de hacerse efectiva la renuncia de los consejeros del Partido Popular. Como primera medida, Rivero ha reducido de diez a ocho las consejerías autonómicas. Se han suprimido las carteras de Turismo y la de Agricultura, Ganadería y Pesca, que se han incluido en otras dos. El presidente canario anunció también el recorte de un 13% en los altos cargos del Ejecutivo, así como de un 14% en lo que se refiere al personal de confianza.
Paulino Rivero lanzó un mensaje de tranquilidad y aseguró que los canarios "seguirán contando con un Gobierno centrado, que sabe escuchar, que respeta, se hace respetar y que sabe gobernar". La reestructuración del Gobierno regional se ha producido 72 horas después de que el ya ex vicepresidente popular José Manuel Soria diera por roto el acuerdo entre Coalición Canaria y el PP por el apoyo de Rivero a los Presupuestos Generales del Estado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 24 de octubre de 2010