"Queremos que los extranjeros nos devuelvan América", gritan los seguidores del Tea Party. ¿A qué extranjeros se refieren? Porque en eso que ellos llaman América, o sea, Estados Unidos, todos son extranjeros de origen menos los descendientes de sus legítimos propietarios que están recluidos en parques temáticos. La demagogia no conoce límites.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 30 de octubre de 2010