En medio de reforzadas medidas de seguridad por la amenaza de atentados islamistas en Alemania, la policía cerró ayer la cúpula del Reichstag, la sede del Parlamento federal y una de las principales atracciones turísticas de Berlín. El ministro del Interior, Thomas de Maizière, había advertido el pasado miércoles de que cuenta con "indicios concretos" de planes terroristas.
Según el semanario Der Spiegel, los indicios de que dispone Interior señalan planes de islamistas "vinculados a Al Qaeda" para asaltar el Reichstag y perpetrar una matanza con rehenes. Unas 10.000 personas visitan diariamente la cúpula del Reichstag. La construcción acristalada y la explanada contigua permanecerán cerradas hasta nuevo aviso. Solo se permitirán las visitas guiadas y reservadas con antelación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de noviembre de 2010