"España es insostenible económicamente en estos momentos". Vicente Lafuente, presidente de Femeval, la patronal provincial del sector del metal de Valencia, no defraudó las expectativas. Lafuente aprovechó la gala de entrega de los premios que anualmente concede Femeval para cargar sin contemplaciones contra la inacción de los políticos ante la crisis económica y contra los solapamientos administrativos y sobrecostes que genera el actual Estado de las Autonomías.
"La falta de reconocimiento de la gravedad de la situación nos está llevando a no adoptar las medidas efectivas que ayuden a paliarla", arrancó Lafuente, "este es el principal motivo del alcance de esta crisis en España con respecto a otros países. Y es algo que no nos puede volver a ocurrir".
El presidente de Femeval describió el desolador panorama que ha provocado la crisis durante el último año. "El sector del metal ha registrado el peor dato de los últimos treinta años, con una pérdida de 180.000 empleos de media anual en España y más de 21.000 en la Comunidad Valenciana".
Y cargó contra los políticos: "La sociedad necesita que se resuelvan los problemas y no que se generen más de los ya existentes. Necesitamos saber que los políticos son capaces de tomar medidas, que aunque sean duras, sean efectivas".
Una vez más, Lafuente puso el acento en la morosidad de las administraciones: "Los atrasos en los pagos a proveedores, subvenciones, fondos para formación o en las ayudas a planes de fomento de consumo, así como el retraimiento en inversiones en infraestructuras son algunos ejemplos que confirman que el sistema no funciona". Pero introdujo un salto cualitativo: "Si no se redefine el modelo económico de la España de las autonomías, este problema irá seguro en aumento. Tenemos una superposición brutal de administraciones tanto europea, como nacional, autonómica, municipal o de diputaciones. Tenemos un Ferrari de lujo pero no tenemos dinero para ponerle gasolina, en estas condiciones, no podemos trabajar para alcanzar un gran pacto nacional que convierta a este país en una España vertebrada y de progreso, y no en un reino de taifas en bancarrota".
Lafuente también reclamó una profunda revisión de la negociación colectiva y concluyó con una petición al gusto de su público: "Apoyo a la economía real, a la economía de polígono".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 26 de noviembre de 2010