La fiscalía ha archivado la denuncia de un funcionario por presuntas irregularidades en el concurso para optar a una plaza en el Instituto de Seguridad Pública, a la que optaba el ex director de los Mossos d'Esquadra, Rafael Olmos, por considerar que no existe ninguna infracción penal. El denunciante, Miguel Ángel Marugán, también optaba a esta plaza y considera que se hizo a medida de Olmos y que todos los miembros del tribunal le conocían personalmente y algunos habían trabajado a sus órdenes. El supuesto perjudicado anunció a Europa Press que presentará un contencioso-administrativo.
El caso también llegó a manos de la Oficina Antifraude de Cataluña, que en octubre requirió al Departamento de Interior que paralizara la adjudicación de la plaza y que le entregaran toda la documentación del expediente administrativo. En una resolución de Interior publicada por el Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya el 5 de agosto, Olmos figura como uno de los cuatro aspirantes admitidos para la plaza, mientras que se excluyó a otros cinco por defectos de tramitación de sus instancias.
Esa resolución la firmaba el secretario general de Interior, Joan Boada, quien aseguró que tenía "la convicción de que las cosas se habían hecho bien" en el proceso de adjudicación seguido, el mismo que para otros casos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 3 de diciembre de 2010