Una parte de los Presupuestos Generales del Estado para 2011 ha quedado ya superada por los acontecimientos, incluso antes de terminar su tramitación y salir de las Cortes.
Partido Popular, CiU y BNG aprobaron ayer en la Comisión de Presupuestos del Senado el veto a las cuentas, que deberá ser ratificado el próximo lunes en el Pleno de la Cámara alta. Si ninguno de esos grupos, más ERC e ICV que también han presentado otro veto, rectifica su posición, los Presupuestos volverán al Congreso sin que pueda incluirse ninguna otra enmienda parcial más.
Eso supone que si, por ejemplo, las medidas de ajuste anunciadas por José Luis Rodríguez Zapatero anteayer y que se aprobarán hoy en Consejo de Ministros, suponen incremento de gasto o disminución de ingresos no podrá consignarse en los Presupuestos.
Obviamente, tampoco podrán incluirse medidas nuevas o circunstancias sobrevenidas, en plena turbulencia económica mundial. El PSOE tenía la esperanza de que, finalmente, CiU cambiara de posición y, tras las elecciones autonómicas catalanas, optara por reconsiderar su veto a los Presupuestos, pero hasta el momento los nacionalistas se muestran firmes en su posición.
Para levantar el veto en el Congreso de los Diputados, el Gobierno tiene ya asegurados los votos necesarios, con PNV y Coalición Canaria obtendrán la mayoría absoluta. El Pleno se celebrará a finales de este mes de diciembre.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 3 de diciembre de 2010