Se le conocía como El Negro, aunque por sus venas corría sangre mulata. José Manuel Ramos Delgado, central del River argentino y del Santos brasileño de los sesenta, falleció el 3 de diciembre de alzhéimer, a los 75 años, en Buenos Aires, la provincia en la que había nacido.
Ramos fue un defensa en tierra de atacantes de lujo y destacó por ser como ellos: de técnica exquisita, precisión en los pases y gran dominio del balón. Fue un argentino de corazón brasileño, donde pasó gran parte de su carrera deportiva. Allí, en el Santos, triunfó, fue campeón Paulista en cuatro ocasiones, jugó con los mejores del mundo y se llevó grandes amigos, como Pelé.
El momento cumbre de la carrera de Ramos lo vivió en Brasil, donde llegó en 1967. En el Santos pudo desplegar su juego en uno de esos equipos que han marcado la historia del fútbol. Compartió terreno de juego con Pelé, Gilmar, Zito, Clodaldo, Torres, Megalvio, Lima y Coutinho para sumar un total de 324 partidos. Juntos ganaron cuatro campeonatos Paulistas (1967, 1968, 1969 y 1973). El último fue el año de su retirada, que se produjo durante su breve estancia en el Portuguesa Santista al final de 1973. Con casi 60 años, en 1994, obtuvo el título de periodista deportivo y ejerció en varias emisoras de Buenos Aires.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 10 de diciembre de 2010