Los bomberos del Ayuntamiento de Madrid han decidido que no harán ni jornadas ni guardias extras a partir del próximo 1 de enero. De esta forma, radicalizan el conflicto que mantienen desde hace meses con el Consistorio, al que acusan de incumplir sus promesas de ampliar la plantilla y mejorar los medios materiales.
Los integrantes del servicio de extinción de incendios quieren equiparar su jornada laboral actual de 37,5 horas semanales a las 35 del resto de trabajadores municipales. Aseguraron que cobran unos 1.800 euros al mes. También mantuvieron que quedan por cubrir 100 plazas tras las jubilaciones iniciadas en 2008, según UGT y CC OO.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 11 de diciembre de 2010