El Mazembe, equipo de la República Democrática del Congo y campeón de la Liga de Campeones africana, destrozó todos los pronósticos, batió al Internacional de Portoalegre por 2-0 y se convirtió, de paso, en el primer conjunto de su continente en disputar una final del Mundial de Clubes. En el partido decisivo le espera el vencedor del encuentro entre el Inter, campeón europeo, y el Seongnam Ilhwa, campeón asiático: hoy (18.00, La Siete).
El Mazembe derrotó en los cuartos de final al Pachuca, mexicano, también por 2-0, para ahora pasar por encima del campeón de la Copa Libertadores y vencer por el mismo resultado, con goles de Kabungu y Kaluyituka. Este equipo africano ya disputó la edición del Mundial de Clubes de 2009, aunque su paso fue efímero, ya que cayó en la primera eliminatoria y acabó en la séptima posición del torneo. Ahora, de la mano del técnico senegalés Lamine N'Diaye, ha alcanzado un nivel competitivo inusual en los conjuntos africanos al abandonar el papel de comparsa, habitual en los torneos internacionales entre clubes. En su palmarés brillan cuatro títulos africanos (1967, 1968, 2009 y 2010) y tiene 10 Ligas de la República Democrática del Congo (cinco de ellas en esta primera década del siglo) y cinco títulos de Copa.
El Mazembe está presidido por Moïse Katumbi, empresario y político congoleño, actual gobernador de la provincia de Katanga. Es hijo de Nissim Soriano, judío sefardí que emigró en el periodo de entreguerras de la isla de Rodas huyendo del fascismo italiano. La fuerza económica de Katumbi sostiene al campeón africano, cuya actuación en la presente edición del torneo es todo un aviso para el Inter, presumiblemente vencedor en el choque de hoy contra el Seongnam.
El Internacional de Portoalegre logró el título en la edición de 2006 y se perfilaba como el rival del equipo europeo, en el que su entrenador, el español Rafael Benítez, muy cuestionado, se juega su continuidad en el banquillo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 15 de diciembre de 2010