"Me golpeó con el puño derecho cerrado en el ojo izquierdo", declaró ayer a un tribunal de la Audiencia de Alicante una mujer, víctima de una agresión por parte de su ex pareja que le acarreó la pérdida de la visión en el único ojo que conservaba. El fiscal solicitó para el agresor 10 años de prisión y una indemnización de 300.000 euros.
Los hechos ocurrieron el 25 de julio de 2004 en la habitación de un hotel de Benidorm, donde ambos pasaban unos días de vacaciones. La pareja, que había roto la relación tres años antes, tiene una hija, cuya custodia pertenece al progenitor por problemas psiquiátricos de la mujer. Según el relato de los hechos del fiscal, el procesado despertó de manera brusca a la mujer para recriminarle que roncaba. Ello derivó en una discusión entre ambos que acabó con la agresión del hombre, "y a sabiendas de únicamente conservaba algo de visión en el ojo izquierdo, le lanzó contra éste un fuerte puñetazo". La mujer había perdido ojo derecho en un accidente unos años antes.
El acusado negó las imputaciones y únicamente admitió que mantuvo un forcejeo con su ex pareja, aunque no rechazo de manera tajante que le propinara un puñetazo en el ojo. "Nunca quise hacerle daño, y hasta acepté el viaje a Benidorm para que pudiera pasar unos días con su hija", dijo. "Por hacer el bien, ahora me veo metido en esto", añadió.
El forense confirmó que el puñetazo "fue contundente" y fruto de las lesiones que le provocaron su vida quedó "muy limitada". La defensa pidió la absolución por falta de pruebas o alternativamente un año de cárcel y 2.700 euros de indemnización.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 16 de diciembre de 2010