El presidente surcoreano, Lee Myung-bak, dijo ayer en un discurso con motivo del Año Nuevo que la puerta hacia la paz con Corea del Norte sigue abierta, aunque Pyongyang debe mostrar su disposición al diálogo. "Quiero recordar al Norte que el camino hacia la paz está abierto", indicó Lee en un discurso repleto de menciones al régimen de Pyongyang, cuyas relaciones con Seúl pasan por el peor momento desde la Guerra de Corea (1950-53).
Lee afirmó que Corea del Norte debe mostrar "seriedad" y demostrar con hechos sus intenciones de acercamiento. Además, dijo que Seúl tiene la intención de mejorar "drásticamente" la cooperación económica con su vecino. Lee pidió a los miembros de las potencias implicados en las conversaciones a seis bandas para la desnuclearización de Pyongyang -las dos Coreas, EE UU, China, Japón y Rusia- que desempeñen un papel "justo y responsable".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 4 de enero de 2011