Los príncipes de Dinamarca presentaron ayer a sus mellizos, un niño y una niña, nacidos el pasado sábado en el Rigshospitalet de Copenhague. Como una "enorme experiencia" definió Mary el parto, añadiendo que había tenido "buena ayuda" de su marido. El retraso en su alta se debió a que el varón sufrió ictericia pero ya se encuentra en buen estado. "Ama a su hermana, siempre la está buscando cuando están en la cuna", dijo la princesa. El heredero no descartó que vayan a tener más hijos. Los nombres de los pequeños se conocerán el día de su bautizo. La pareja ya tenía dos niños.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 15 de enero de 2011