"¿Entra entre las funciones de la presidenta del Puerto de Vigo convocar a la ultraderecha mediática para la emisión de un programa de televisión?". La pregunta la hizo ayer la senadora y portavoz del PSOE en la Cámara Alta, Carmela Silva, después de que la cadena Intereconomía emitiese en la noche del jueves un programa especial desde la ciudad. Con el logotipo oficial de la Autoridad Portuaria al fondo, el conductor del espacio, Antonio Jiménez, entrevistó esa noche a la presidenta de la institución, Corina Porro, que "por cortesía" cedió las instalaciones a ese canal para que las utilizasen como plató. "Estamos en un Puerto que estaba muerto y que Porro ha resucitado", arrancó Jimenez con la melodía de una banda de gaitas de fondo.
Apoyado por Carlos Dávila (director del periódico La Gaceta, de tendencia tambien ultraderechista), y con los comentarios del economista Juan Iranzo, la periodista Carmen Tomás y el ex presidente de Banesto Mario Conde -condenado por estafa a 20 años de prisión, todavía en libertad condicional y metido ahora a analista político-, Porro análizó la política del alcalde, Abel Caballero: "Es bueno hacer las cosas de otra forma. En estos últimos años el Puerto hizo inversiones con retorno y la ciudad hizo gasto". Preguntada por cuánto empleo generaron los recursos invertidos por el Plan E respondió: "Con todos los respetos, la mayoría de contratados para esas obras eran portugueses". Semejante análisis mereció una ovación del público.
"Ataque a la ciudad"
Para Carmela Silva, que duda de que el espacio se haya financiado con fondos públicos, "se atacó de forma incalificable" al presidente del Gobierno, al alcalde de la ciudad y a la ciudad de Vigo. "No se pagó por el programa, simplemente se les cedió por cortesía y encontraron que era un recinto apropiado. La presidenta también participó por cortesía", manifestó ayer un portavoz del Puerto. La senadora socialista manifestó su preocupación por el "bajo nivel de conocimiento técnico y político sobre temas relevantes de España y de la ciudad", que, según ella, demostró la presidenta del Puerto.
"Los vigueses deben estar muy molestos porque, en ese programa se mostró una ciudad que no se corresponde con la realidad: que no tiene futuro, ni potencialidades y abandonada". "Los vigueses no se merecen unos políticos que hablen mal de la ciudad", apuntó Silva.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 15 de enero de 2011