Esta semana he visto en La 2 un reportaje sobre la Obsolescencia Programada, es decir, la política de las empresas de diseñar productos que se estropeen o dejen de funcionar en un determinado periodo de tiempo. Me escandaliza que desde la década de los sesenta existan esas políticas empresariales y que estas políticas sean consentidas por los Gobiernos. Teniendo en cuenta que para 2050 muchos metales como níquel, oro, plomo, plata, cobre y otros habrán desaparecido, me parece un escándalo global las políticas empresariales de crear productos de "usar y tirar". Y sobre todo que los Gobiernos no lo regulen.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 15 de enero de 2011