La Diputación de Vizcaya cerró el pasado ejercicio con una recaudación fiscal de 6.103,5 millones de euros, lo que supone un aumento del 8,7% con respecto a 2009. La cifra, que incluye los ajustes internos con las otras dos diputaciones y con el Estado en materia de IVA e Impuestos Especiales, supera en concreto en 487,8 millones la alcanzada en 2009.
El diputado de Hacienda y Finanzas, José María Iruarrizaga, presentó ayer al Consejo de Gobierno foral el cierre de recaudación del pasado ejercicio, cuya mejora se ha basado en "la positiva evolución" de la imposición indirecta, marcada especialmente por la subida del IVA a mediados de año. La Diputación explicó que esta ha mejorado en casi 550 millones las previsiones presupuestarias, tanto en lo que se refiere a los ingresos por gestión propia (417 millones) como a los ajustes con el Estado (130 millones).
En cambio, la imposición por tributos directos, como el IRPF o el Impuesto de Sociedades, ha caído en 68 millones, por la "esperada" evolución negativa de la cuota diferencial de este último y de las retenciones sobre operaciones de capital.
El informe del tribunal
Mientras, el diputado de Hacienda alavés, José Luis Cimiano, señaló ayer que la diferencia de 112 millones de euros en el remanente de tesorería de 2008, revelado en su último informe por el Tribunal Vasco de Cuentas Públicas, se debe a "una diferencia de criterios". Cimiano aseguró que "no existe ninguna situación de riesgo ni de desequilibrio financiero, y no tiene nada que ver con el presupuesto".
Dichas declaraciones se producen después de que el PP criticase la diferencia en las cantidades de remanente esgrimidas por la Diputación, quien afirmó contar con 148 millones, y el tribunal, que rebajó esa cifra a 36 millones.
"Nos sorprende que el tribunal haya puesto objeciones a los aplazamientos activos de interés reducido y al remanente de tesorería disponible, que según el tribunal debe reducirse", destacó Cimiano. En concreto, el tribunal, aprecia una diferencia de 112 millones que la institución foral no podía considerar como recursos propios: 79,2 millones procedentes del dinero que la Diputación recuperó por las deducciones fiscales a empresas en la década de los noventa y 33,1 millones del Fondo Foral de Financiación de las Entidades Locales (Fofel).
El teniente de diputado general alavés, Claudio Rodríguez, negó que la institución hinchase las cuentas, como sostiene el PP, y acusó a este partido de hacer interpretaciones "torticeras" del informe del organismo auditor.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 19 de enero de 2011