Parece que los revivals, en vez de provocar curiosidad, han aniquilado la vocación arqueológica de muchos recién llegados a esto de escuchar discos y defenderlos en foros de Internet. Mientras, el universo de lo viejuno se atrinchera y opta por darle la espalda a la actualidad alimentándose de recuperaciones exprés de artistas olvidados como Wanda Jackson. Se dice que fue la primera mujer en grabar un rock and roll en 1958. Hoy, a sus 73 años, es rescatada del circuito de oldies para volver a la gran liga por Jack White, quien le produce un disco de versiones de clásicos de Hank Williams o Bob Dylan —además de un tema de Amy Winehouse- que es y suena muy bonito. Otro ejercicio de predicación al converso.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 21 de enero de 2011