El portavoz nacional del Bloque, Guillerme Vázquez no ve riesgos de escisión dentro de la formación frentista, ni tampoco considera una amenaza del Encontro Irmandiño las duras palabras que el sábado 15 lanzó Xosé Manuel Beiras en la clausura de la III Asamblea Nacional de esta corriente interna del BNG.
No obstante, el líder actual del Bloque replicó a Beiras que nunca la organización nacionalista "ha tenido tantos militantes como en la actualidad". El mensaje lo lanzó Guillerme Vázquez en una entrevista en la Cadena SER donde se mostró confiado en que el histórico dirigente nacionalista seguirá aportando ideas al BNG y acatando las decisiones "democráticas" que adopte el frente de partidos. Pronosticó que ni Encontro Irmandiño ni ningún otro sector abandonará las siglas del BNG. "No tengo una bola de cristal pero creo que ese peligro no existe, de producirse lo lamentaríamos", declaró. Si bien admitió, a renglón seguido, que "militar en el BNG es algo voluntario" y que "el partido tiene las puertas abiertas".
"Más autogobierno"
En cuanto al debate que una parte de la derecha española y sus medios más incondicionales han abierto sobre la recentralización del Estado retirándole atribuciones a las autonomías, Guillerme Vázquez aseguró que su postura es exactamente la contraria. "Si existen duplicidades", vino a decir, debería ser el Gobierno central el que cediese competencias a las comunidades "que también son Estado". El portavoz nacional interpeló directamente al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, para que se pronuncie sobre si Galicia precisa más autogobierno. De no ser partidario de aumentar el techo competencial, defendió Vázquez, el presidente debería explicar cómo piensa hacer frente a la crisis.
También tachó de tramposas las críticas al hecho de que en el Senado como cámara territorial que es se pueda hablar en cualquiera de las lenguas oficiales. Recordó que esa partida está incluida en el presupuesto de la Cámara Alta, "que la iba a gastar en la traducción o en otra cosa", y criticó que fuese una senadora gallega, María Jesús Sainz, la que decidiera no usar el gallego. Se preguntó por qué no lo hizo uno catalán. Y censuró que el presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, nunca pronunció una palabra en gallego, por más que Fraga le hubiera recomendado aprender este idioma.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 24 de enero de 2011