El edificio residencial más alto de España, la Torre Lugano de Benidorm, de 148 metros en 48 niveles y 204 viviendas, ha entrado en una espiral insólita. La comunidad de propietarios ha presentado ya cuatro demandas contra el promotor, que a su vez intenta anular en el juzgado todas las actas de las juntas generales convocadas para invalidar sus decisiones.
Los propietarios han decidido demandar por cuarta vez a la promotora porque se niega a ingresar en la cuenta común las derramas y las cuotas de los inmuebles que todavía posee. Si el 15 de febrero no han pagado, solicitarán la celebración de un juicio monitorio, según acordaron a mediados del mes pasado. Y es que a 31 de diciembre la deuda era de 154.160,12 euros, cantidad a la que habría que añadir los 19.742,64 euros de enero y febrero. El débito alcanza los 193.645,4 euros, de los que 87.000 han sido consignados en una notaría porque responden a la derrama extraordinaria para la formulación de una demanda contra la promotora, constructora y el arquitecto por vicios constructivos, presentada el pasado 15 de junio, por un importe de 28,2 millones de euros. Y eso que llevan invertidos en dos años y medio unos 750.000 euros, cantidad que incluye una derrama de 171.000 para reparaciones y otra de 200.000 para gastos judiciales.
Un vecino atribuye la actitud de la empresa promotora a que "está intentando asfixiarnos económicamente para evitar que podamos hacer un mantenimiento adecuado y luego justificar las innumerables deficiencias".
Contener el gasto
La deuda del promotor ha llevado a la comunidad a acumular un déficit de 67.000 euros, lo que les ha obligado a contener el gasto. Cuatro de los seis ascensores no funcionan, ya no disponen de vigilancia, únicamente de portería y limpieza. Aparte de la demanda por vicios constructivos y de la que reclamará las deudas, los propietarios tienen presentada otra para reclamar el libro del edificio y una demanda civil más en la que reclaman 2,6 millones de euros porque el edificio se habría apropiado de 1.553,46 metros de edificabilidad.
Torre Lugano fue promovida por Bancaja y Acciona a través de Torre Lugano, SL, y luego Acciona se asoció para su construcción con Edificaciones Ferrando, la empresa de Rafael Ferrando, el presidente de Cierval y vicepresidente de la CEOE.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 7 de febrero de 2011