La nueva Batasuna, impulsada por sus dirigentes históricos bajo la denominación de Sortu ("nacer", en euskera), pretende cumplir escrupulosamente la Ley de Partidos para ir a las elecciones del 22 de mayo. Sus estatutos, que se registraron ayer en el Ministerio del Interior, establecen un explícito rechazo a la violencia de ETA. Además, Sortu impone a sus futuros candidatos la obligatoriedad previa de asumir ese rechazo. Posiblemente por escrito. En su comparecencia de ayer en Madrid, los fundadores de Sortu evitaron pedir la disolución de la banda.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de febrero de 2011