El júbilo que desbordó ayer la dimisión del presidente egipcio, Hosni Mubarak, hizo que numerosas personas salieran a la calle de forma espontánea para celebrar la victoria de la revolución en la Puerta del Sol. Las expresiones de la gente eran muy diferentes a las que hace 12 días mostraban en la concentración en Madrid, organizada por el cineasta egipcio afincado en la capital Basel Ramsis, que ayer relató desde El Cairo el éxito de la revuelta.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 12 de febrero de 2011