Abertis segregará sus negocios de aparcamientos y logística en una nueva compañía no cotizada, Saba Infraestructuras, para captar socios que le aporten capital para su crecimiento. La actual compañía se quedará con las áreas de autopistas, telecomunicaciones y aeropuertos, lo que representa más del 95% de sus ingresos. La operación se hará con un dividendo extraordinario que se cobrará con acciones de la nueva Saba o en efectivo.
La estructura accionarial de Abertis cambió el pasado mes de agosto con la entrada del fondo británico CVC, que ostenta el 15,55% de la compañía. Con esa incorporación, ACS -que busca hacer caja para tomar el control de Iberdrola- redujo su participación al 10,28%, mientras que Criteria se quedó con el 28,48%. El presidente de Abertis, Salvador Alemany, desvinculó ayer la operación de la entrada de CVC. "Hubiéramos llegado a la misma reflexión", aseguró Alemany, que también negó que se trate de una "desinversión".
Abertis se mantendrá primero en la nueva sociedad "el tiempo que haga falta" para luego vender parte del capital a inversores institucionales. Sin embargo, la compañía aún debe valorar el negocio de Saba para fijar el importe del dividendo y la deuda que se traspasará a la nueva sociedad, aunque su consejero delegado, Francisco Reynés, adelantó que se tratará de no "estresarla" para que tenga margen para endeudarse. Abertis prevé cerrar el proceso en el primer semestre de 2011. Los títulos de la empresa subieron ayer un 0,59% en Bolsa.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 24 de febrero de 2011