Más de un millar de personas se concentraron ayer en el barrio de la Malva-rosa de Valencia para exigir la construcción de un colegio más y la reforma de los cuatro ya existentes. El tradicional carnaval marinero que desde hace tres años organiza la Coordinadora de Asociaciones de Padres del barrio, aprovechó una vez más para "convertir el pasacalle en una verdadera manifestación cívica por la escuela pública". Cientos de alumnos disfrazados con los más diversos atuendos con la pancarta de cada uno de sus respectivos colegios, acompañados por sus familiares y profesores de los centros públicos, recorrieron el barrio a ritmo del pasacalle que tocaba una murga.
El carnaval de 2011 revindicó, en esta ocasión, "el entierro de todo lo caduco, lo viejo, de la corrupción y la incompetencia valenciana", en las octavillas que inundaron las calles. La "esperanza" del barrio es que "llegue pronto la primavera y que nazca algo nuevo, defiendo la escuela pública y una sociedad democrática", en referencia a una posible alternancia de color político tras las elecciones del próximo 22 de mayo.
Por otro lado, en Alicante un centenar de madres y alumnos del colegio Majón Cervantes se manifestaron en protesta por los cambios de planes del Ayuntamiento. El colegio, declarado en ruina, estaba pendiente de su demolición y nueva construcción, sin embargo, ahora el consistorio plantea una reforma.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 25 de febrero de 2011