El consejero de Interior, Felip Puig, al final ha tirado por la calle de en medio y ha eliminado la Secretaría de Seguridad que debería haber ocupado el alcalde de Lloret de Mar (Selva), Xavier Crespo. Después de dos meses de suspense, el portavoz del Gobierno, Francesc Homs, anunció ayer la creación en su lugar de la Dirección General de Administración de Seguridad, que dependerá de la secretaría general. Cuestión de "autoorganización" de Interior, según Homs.
La decisión pone fin a la estructuración del departamento y al caso Crespo. El 3 de enero trascendió el nombramiento del alcalde de Lloret como secretario de Seguridad. Crespo se despidió de los trabajadores del Consistorio y devolvió su escaño como diputado. Pero la designación no se materializó y el alcalde corrió a recuperar su acta.
Durante 50 días, Puig mantuvo que Crespo sería secretario y atribuyó el retraso a que el alcalde pedía tiempo para organizar su salida. Crespo designó a su sustituto en Lloret, pero el nombramiento seguía sin llegar. El 21 de febrero, el alcalde renunció al cargo.
Joan Delort, secretario de Seguridad en funciones, abandona el puesto tras 10 años en Interior. Asesorará a Puig y mantiene su plaza como alto funcionario de la Generalitat. El nuevo director es Andreu Joan Martínez, jefe del servicio de gestión administrativa de la Escuela de Policía desde 2002.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 2 de marzo de 2011